NÚMERO 373 JULIO 24 - 2017 (LUNES)
FUNDADO EN AGOSTO 12/2012.
Director
Editora y Asesora
Alba Hoyos Botero
1ª entrega de los premios
ANTURO
ANTURO
Enlaces
https://www.facebook.com/deataketg/photos_stream
Cada una de las personas que habitan el planeta puede actuar en beneficio de los recursos naturales y así garantizar su bienestar y el de futuras generaciones.
En primer lugar hay que utilizar racionalmente el agua, lo que significa reducir la cantidad empleada en los quehaceres domésticos, y mientras se toma una ducha o se lavan los dientes.
¿CÓMO CUIDAR LA NATURALEZA?
Cada una de las personas que habitan el planeta puede actuar en beneficio de los recursos naturales y así garantizar su bienestar y el de futuras generaciones.
En primer lugar hay que utilizar racionalmente el agua, lo que significa reducir la cantidad empleada en los quehaceres domésticos, y mientras se toma una ducha o se lavan los dientes.
Los grifos y
las tuberías hay que repararlos en casos de fuga. Demandar en los proyectos
habitacionales e industriales plantas de tratamiento, también es
imprescindible, porque es una responsabilidad ciudadana, empresarial y gubernamental, devolver a la naturaleza —y tan limpia como sea posible— el agua utilizada.
También es fundamental emplear para
la limpieza productos biodegradables; es decir, que no contaminen ríos y lagos.
Así se evita la pérdida de los seres vivos que los habitan. De ser posible hay
que clasificar la basura —vidrio, papel, latas— y depositarla en recipientes
adecuados para su disposición final. Moderar el consumo de electricidad ayuda
al planeta y al bolsillo, porque reduce el monto de las facturas. ¡Todas las
acciones cuentan!
La naturaleza es parte de
nuestra vida. Y de nuestra salud. Por eso, hay que enseñar a los niños a cuidar y respetar la
naturaleza, desde bien pequeños. Nuestros hijos
e hijas aprenden más con acciones que sólo con palabras o
repeticiones de órdenes. Es importante que el aprendizaje sea significativo y
experiencial, se debe aprender observando, viviendo, estando allí, y sobre todo sabiendo cómo se hacen las cosas. Por eso hay que enseñarlos a tomar parte
activa del cuidado del medio
ambiente mediante la práctica, y explicarles las consecuencias de
nuestros actos.
Los padres somos
los primeros que debemos cumplir con el ejemplo y enseñar a nuestros hijos a respetar nuestro
entorno y cómo debemos conservarlo y mejorarlo.
La educación ambiental va
dirigida a formar valores, actitudes y conductas a favor del medio ambiente,por lo que es preciso transformar
esas actitudes, conductas y comportamientos humanos así como adquirir nuevos
conocimientos.
“Nos vamos de excursión con la familia al campo o
montaña y queremos que nuestros hijos vivan y aprendan a cuidar el entorno”.
Normas básicas de respeto a la naturaleza
NO MOLESTEMOS A
LOS ANIMALES
Los animales necesitan cariño,
atención y respeto. Tanto nuestras mascotas, como el resto de los
animales. Hay que educar a los niños en
este aspecto y hacerles entender que, además de a las personas, también tenemos
que respetar a los animales y no hacerles daño. De hecho, hay muchas terapias
educacionales con animales, ya que estos aportan
a los niños una serie de comportamientos y valores muy positivos para su
crecimiento. También hay que concienciar sobre el respeto a los animales
en peligro de extinción, que podemos conocer a través de dibujos, o en el zoo.
Y, como todos sabemos,a los niños les
encantan los animales, por lo que ir de excursión a algún bosque, safari
o campo, para que puedan ver animales que no han visto nunca, es una estupenda excursión en familia y una aventura para
el niño o niña.
LA BASURA AL
CONTENEDOR
Desde pequeños tenemos
que enseñar a tirar los desperdicios a la basura. Pero no sólo en casa, sino
también fuera, y especialmente en lugares de naturaleza. Por supuesto, ellos van a seguir nuestro ejemplo como
padres, constantemente. Por lo que esta acción tiene que ver con nuestra educación en los niños. No se
abandona la basura en el campo ni se entierra para que se degrade (pues pasarán
muchos años y siempre quedará su rastro). Si hacemos una excursión, siempre hay
que llevar bolsas de plástico para almacenar los desperdicios y luego
depositarlos en el contenedor.
SEGUIR EL
SENDERO
Cuando vayamos de ‘aventura’
con niños al campo o al bosque, hay que procurar no salirse del
sendero marcado. Respetar el trazado y no tomar los atajos, que estropean el
camino original, deterioran el suelo aumentando la erosión y son más peligrosos
y agotadores por su pendiente. Además así también estamos fomentando en
nuestros hijos el hecho de saber respetar
una norma.
SALUDAR A LA
GENTE
No
olvidemos dar los buenas días y saludar
a la gente que nos crucemos en el campo. Debemos recordar que en el
campo todo el mundo se saluda. Así pues, no rompamos esa cordialidad y buenas prácticas de convivencia. Y por supuesto, que los niños también lo hagan y se acostumbren
a ello, pues cuando sean más mayores denotarán en ellos la buena educación inculcada.
CUIDAR EL AGUA
Y
qué sería de la naturaleza sin agua… bueno, ¡y de nosotros! Por eso es una de
los elementos que más tenemos que cuidar
y respetar en el campo. Respetemos las fuentes, los cursos de agua, los
riachuelos, ríos, lagos… Nunca hay que echar en ellos jabones, detergentes,
productos contaminantes o residuos. ¡Pero ello no quiere decir que no nos
podamos divertir con nuestros hijos en
el agua!
HACER CAMPING
Acampar es una de las
aventuras que más ilusión le puede hacer a un niño.
Para ellos es algo inolvidable y lleno de diversión. Romper con la rutina
diaria e irse con sus padres de aventura, para los niños es una de las cosas más
emocionantes que pueden vivir. Ahora bien, no se puede acampar por libre. Hay
que respetar los lugares de acampada, las señales existentes y a los agentes
que velan por la naturaleza y la seguridad de todos.
RESPETAR LOS
CARTELES Y LAS PROPIEPADES PRIVADAS
Y
hablando de respetar, hay que tener cuidado con las propiedades privadas que
existen en el campo. No solo porque infringiríamos la ley, si no porque puede
ser peligroso para nuestra familia.
Hay que tener cuidado con las zonas militares o los cotos de caza. Y debemos
respetar la propiedad ajena. Hay que enseñar
a los niños a no saltar las vallas de los cercados plantados ni
coger sus frutos. ¡Los dueños trabajan muy duro para mantener sus tierras!
los
cotos de caza. Y debemos respetar la propiedad ajena. Hay que enseñar a los niños a no
saltar las vallas de los cercados plantados ni coger sus frutos. ¡Los dueños
trabajan muy duro para mantener sus tierras!
Esperamos que el paseo haya sido muy agradable y que hayamos aprendido cosas interesantes a la hora de visitar la naturaleza en todo su esplendor. En
anteriores post os mostramos una escapada que se puede hacer con la familia, esperamos que la podáis disfrutar y poner en marcha todo lo
aprendido.
Espero que hayan disfrutado de su Contenido, hasta pronto…
La información e imágenes publicadas en esta revista están
extractadas de la Internet, principalmente de Google,
EL COLOMBIANO, El Barquero de EJE 21, EL TIEMPO, EL ESPECTADOR,
EL CAMPANARIO, LA BARCA DE CALDERÓN, EL OBSERVATORE
ROMANO,
de la página no censurada de JUAN GUERRA, CLARIN desde Argentina,
EL UNIVERSO desde Ecuador, EL INFORMADOR desde Santa Marta, PORTAFOLIO, Juan Gossaín, DINERO, DIARIO DE AMÉRICA, PERIODISMO
SIN FRONTERAS y demás prensa lo mismo que los correos que llegan
vía email. Si hay algún error o queja, se pueden contactar con nosotros
en: avizor2012@gamil.com. Además, los artículos y opiniones que se publican en cada edición, es de responsabilidad exclusiva de cada articulista y en ninguna forma comprometen el pensamiento editorial
del Director de OJO AVIZOR. QUEREMOS PRECISAR QUE, NOSOTROS NO PLAGIAMOS Y LO ÚNICO QUE HACEMOS CON TODO RESPETO, ES REPRODUCIR LOS COMENTARIOS U ARTÍCULOS QUE POR SU
INTERÉS RESALTADOS EN NUESTRA REVISTA, RECONOCIENDO
QUIEN ES EL AUTOR DEL MISMO Y QUE AMERITE QUE SEAN
RECONOCIDOS.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario